Francisco Aranda Manzano, presidente de UNO (Organización Empresarial de Logística y Transporte de España)

“Trabajamos con los principales ayuntamientos para construir la ciudad del futuro donde somos muy protagonistas porque realizamos un servicio esencial”

“En nuestro sector cada segundo cuenta, y muchas veces el just in time es absolutamente fundamental y necesario para que no se desajuste toda la cadena de suministro”, afirma Francisco Aranda Manzano, Presidente de UNO (Organización Empresarial de Lógistica y Transporte de España), quien apunta que el tiempo es el gran enemigo del sector en lo que respecta a la seguridad vial. Y es que sus trabajadores desarrollan gran parte de su jornada laboral en la carretera. “Para nosotros la ciudad es nuestro lugar de trabajo”, asegura. Por ello, llevan a cabo importantes medidas de prevención enfocadas todas ellas a reducir la siniestralidad vial. De hecho, tal y como indica el presidente de UNO, “hay centros logísticos en los que se coloca un panel con el número de días sin accidentes para que sea un objetivo de todos”. En Seguridad Vial en la Empresa hablamos con el presidente de la organización para profundizar en este camino común hacia el Objetivo Cero, un reto que, considera, debe ser el de todos.

1. En primer lugar, ¿qué es UNO Logística?

UNO es la Organización Empresarial de Logística y Transporte de España. Representamos los legítimos intereses de las empresas que diseñan, organizan, gestionan y controlan los procesos de una o varias fases de la cadena de suministro: operadores logísticos, empresas de paquetería, courier nacionales e internacionales, transporte por carretera, almacenaje, distribución, empaquetado final, carga aérea, marítimo, distribución urbana de mercancías, departamentos de logística de fabricantes y distribuidores y, en definitiva, cualquier player que valore el transporte y la logística como elemento clave en su estrategia empresarial.

Contamos con más de 350 socios que apuestan por mejorar su competitividad, en un marco de seguridad jurídica y libre competencia.

Entre nuestros asociados se encuentran las empresas más importantes del sector, grandes y pequeñas, nacionales e internacionales, que representan una elevada cuota de mercado, tanto en facturación total como en volumen de envíos y en capital humano.

2. Durante el año 2021 se han registrado un total de 65.342 siniestros laborales de tráfico. ¿Qué papel juega el sector de la logística en la siniestralidad vial laboral?

Nuestro sector es intensivo en capital humano y realiza actividades en las que la prevención de riesgos laborales es crucial. Tanto en los centros logísticos como en el transporte y el reparto de última milla debemos ser muy cuidadosos con la seguridad, pues como todo el mundo sabe en la logística y el transporte el tiempo es crucial y hay que disponer de todas las medidas de seguridad posibles para reducir al máximo el número de accidentes.

3. ¿Qué medidas considera necesarias para disminuir la siniestralidad vial dentro del sector de la logística y el transporte?

En primer lugar, las preventivas, como la formación (la cual, desde UNO, pusimos hace años ya en valor a través de nuestra Escuela de Repartidores) o, por ejemplo, la utilización de una flota lo más moderna posible y con las mejores ayudas a la conducción.

En segundo lugar, la concienciación, que también abordamos todos los años en el Plan de Prevención de Riesgos Laborales que realizamos junto al Instituto Regional de Seguridad y Salud en el trabajo de la Comunidad de Madrid.

Y, por último, obviamente, las reactivas, analizando cada vez que se produce un siniestro cuáles han sido las causas, para poder corregir aquello que lo haya provocado.

4. ¿Cuál cree que es el gran enemigo de la seguridad vial en el transporte y la logística?

El tiempo. En nuestro sector cada segundo cuenta, y muchas veces el just in time es absolutamente fundamental y necesario para que no se desajuste toda la cadena de suministro. Formamos parte del nuevo marketing del comercio porque la experiencia de recepción es clave y entregar en el momento pactado es esencial.

5. Vivimos una revolución con las plataformas de venta online. ¿Es la presión uno de los grandes enemigos de los repartidores? ¿Qué previsiones tienen para este año en lo que respecta a envíos, desplazamientos…?

La presión del cliente es algo con lo que convivimos todos los profesionales de la cadena de suministro, también los repartidores. Pero no por la revolución de las plataformas online, sino porque, como siempre decimos, para nosotros la ciudad es nuestro lugar de trabajo. Por tanto, entregar todos los envíos de una ruta a tiempo, conviviendo con el tráfico, los usuarios, el aparcamiento en doble fila, las obras, etc., genera una gran presión y es algo que tenemos que gestionar cada día. En este sector, para que las empresas sean rentables, hay que hacer un buen número de entregas, por lo que todo debe estar perfectamente planificado.

Con respecto a previsiones, va a bajar el consumo y por tanto el volumen de compras de comercio electrónico, fruto de la espiral inflacionista en la que estamos envueltos, la subida de los tipos de interés y el incremento de precios de los productos, lo cual acarreará una reducción del gasto por parte de los clientes. Además, hay una gran incertidumbre por el futuro y eso contrae el consumo de las familias.

6. Muchos sistemas ADAS son ya obligatorios en vehículos nuevos, ¿considera importante que haya una renovación del parque automovilístico dentro de las flotas de las compañías de logística y transporte?

Absolutamente. Renovar el parque de vehículos en nuestro sector no sólo es necesario por la sostenibilidad, sino también por la seguridad. No es lo mismo un vehículo que te avise de que hay “algo” en un ángulo muerto, o que frene de emergencia ante el cruce inesperado de un peatón, que tener que depender al 100% de las condiciones cognitivas de un repartidor. Todas las ayudas son bienvenidas.

7. ¿Qué papel juega la formación y concienciación dentro del sector? ¿Apuestan las compañías por este tipo de medidas?

Sí, totalmente. Como dije antes son dos ejes principales. Las compañías invierten multitud de recursos en concienciación y formación. Incluso se hace partícipe a toda la compañía. Por ejemplo, hay centros logísticos en los que se coloca un panel con el número de días sin accidentes para que sea un objetivo de todos.

Al mismo tiempo, trabajamos conjuntamente con la Dirección General de Tráfico que está haciendo un gran trabajo de concienciación dirigido a nuestro colectivo.

8. ¿Están los conductores profesionales preparados para las nuevas formas de movilidad que ya forman parte de las ciudades: patinetes, bicicletas eléctricas? ¿Qué medidas considera necesarias para una buena convivencia entre todos los usuarios?

Sí, pero una cosa es conducir y otra muy distinta convivir en la ciudad. Entre todos debemos conseguir que sea tan seguro ir en patinete como en furgoneta, y, por supuesto, la persona que va en patinete debe ser consciente del riesgo que tiene y de la especial precaución con la que se debe mover.

Para conseguir una buena convivencia, en primer lugar, tiene que existir una buena regulación y, en segundo, y más importante, una extendida concienciación. Es como cuando antiguamente no se utilizaba el casco para ir en moto, algo que, por suerte, ya se ha acabado. En patinete, bicicletas eléctricas o similares es aún más importante ir bien protegido, transitar con especial cuidado e ir siempre por el lugar habilitado para ello. Nosotros trabajamos con los principales ayuntamientos para construir la ciudad del futuro donde somos muy protagonistas porque realizamos un servicio esencial.

9. Última milla y largo recorrido, ¿qué medidas considera necesarias para mejorar la seguridad vial en las ciudades y ese reparto urbano?

Junto a la concienciación y formación, es necesario facilitar el trabajo a nuestros repartidores. No podemos estar siempre pidiendo perdón mientras realizamos nuestro trabajo. Por ejemplo, son muy importantes las medidas de digitalización de las plazas de carga y descarga, de forma que éstas se puedan reservar y que los repartidores no tengan que aparcar en doble fila o en calles paralelas para poder realizar sus entregas. En este sentido, ya hemos avanzado en la ciudad de Madrid gracias a una app que ha puesto en marcha el Ayuntamiento. Tenemos también publicado un decálogo de medidas para la DUM que se puede consultar en nuestra página web.

Respecto al largo recorrido, venimos reclamando la construcción de áreas de descanso para conductores seguras y confortables, para que el necesario tiempo de reposo sea de calidad y los profesionales tengan opciones para comer, dormir, asearse …

10. ¿Cree que las políticas de bajo coste o gratuidad en los envíos y devoluciones para los clientes afectan negativamente a la seguridad vial? En caso afirmativo, ¿qué medidas propondría para minimizar estos efectos negativos?

No creo que los precios sean un factor que influya en la seguridad vial. Con respecto a las políticas de precios es algo que marca el mercado y que viene determinado por las estrategias de las empresas.

11. ¿Cómo cree que será la logística y el transporte dentro de 10 años, especialmente en lo que se refiere a movilidad?

Nuestro sector estará mucho más descarbonizado, de eso no hay duda. Pero necesitamos apoyo económico y seguridad jurídica por parte de las administraciones. Con respecto a la conducción, creo que habremos empezado a ver muchos más casos de conducción autónoma, sobre todo en larga distancia.

En cuanto a la última milla, tendremos ciudades mucho más ordenadas, con formas de reparto nuevas o mejor consolidadas, en las que podremos realizar nuestro trabajo de forma más eficiente y, quién sabe, igual hay algún que otro robot o dron haciendo determinadas entregas…

12. Tenemos el gran objetivo de reducir a la mitad el número de fallecidos en siniestros de tráfico para el año 2030. ¿Opina que es un reto alcanzable?

Debe ser el primer objetivo de todos. Viendo los pasos que hemos dado en materia de concienciación, los avances tecnológicos en seguridad que incorporan los nuevos vehículos y la mejora en las propias infraestructuras creo que puede ser un objetivo alcanzable. No obstante, como ocurre con todo objetivo a largo plazo, la clave está en ir dando pequeños pasos, pero en la dirección adecuada.